¿Te suena este nombre? ¿No? Sal de la burbuja. No sabemos qué ha podido pasar, pero Skyrim se ha convertido en un trending topic universal. Y no es que haya vendido tanto como un Modern Warfare, que tenga tanta solera como unSuper Mario o que le apoye una comunidad tan vasta como la de los títulos de Valve. Skyrim se ha levantado a sí mismo por méritos propios, sin que el público mire siquiera al pasado de The Elder Scrolls, y aunque aún no han pasado ni dos meses, sabemos que tendremos Skyrim para rato.
Porque todos en la redacción seguimos jugando, seguimos en nuestra segunda vida en la que somos un Dovahkiin, un Sangre de Dragón en la que no sólo nos encargamos de salvar el mundo, sino que tenemos libertad absoluta para campar a nuestras anchas por un mundo que aún no hemos alcanzado a explorar por completo, y como en la vida real, aunque todos recorramos el mismo camino de esta segunda vida, cada uno lo hace de una forma distinta.
Unos toman los atajos de lo indigno, otros aprovechan sus cualidades naturales, otros tiran de persuasión, pero al final todo se resuelve como nos encantaría, espada en mano y que sobreviva el mejor. Y son tantas las historias que nos contarán, y son tantos los conflictos que tendremos que resolver, tantas las cuevas a explorar y tantas las montañas a escalar, que en muchas ocasiones nos veremos sobrepasados por la cantidad de tareas que podemos llevar a cabo, y eso es algo que se ha traducido de un gran trabajo de años por parte de Bethesda, de un mérito indiscutible. Un mérito que unos bugs no pueden quitar, bugs que además nos han dado para momentos graciosos, y que contribuyen a que Skyrim vaya a seguir siendo lo más comentado durante mucho tiempo.
Pero Skyrim no es el Juego del Año 2011 de MundoGamers sólo porque la red esté invadida por comentarios del quinto The Elder Scrolls. No sólo es el Fus Ro Dah, no sólo son flechas en la rodilla, y no sólo es esa segunda vida que te atrapa. Skyrim es un conjunto casi perfecto, es la complejidad de un RPG llevada a un ámbito sencillo, es un universo del que querer saberlo todo, del que no hace falta conocer cinco entregas para convertirse en erudito, es el caminar por la ladera de una montaña, ser atacado por un dragón, invocar una tormenta y comenzar un combate a muerte refugiándose en una atalaya derruída... Apunta a convertirse en el mejor juego de la generación, pero por el momento es, sin duda, el Mejor Juego del Año 2011.
Fuente:mundogamers.com
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